José Miguel Martín Criado (*)
Pues sí, ya estamos de nuevo en septiembre. Desde pequeño siempre fue un mes ilusionante, volvía al colegio donde estaban mis compañeros y amigos; comenzaba la temporada deportiva, en mi caso fútbol que alterné con el fútbol sala durante mucho tiempo ya que siempre he pensado que hacer varios deportes a la vez enriquece tus capacidades.
Ahora cuando llega septiembre veo con preocupación desde la atalaya que me da mi puesto de trabajo que muchos niños tienen la misma ilusión que teníamos todos mis amigos cuando éramos jóvenes, pero veo a otros niños que llegan sin ese brillo en los ojos que deberían tener y creo que es debido a la presión que cada vez a una edad más temprana tienen desde el núcleo familiar.
Me gustaría hacer una reflexión a todos los padres: el deporte es en su sustancia un juego y como tal una diversión. Puedo decir con propiedad que cuando el deporte deja de ser placentero sólo tiene dos motivos: o es profesional, como tal un trabajo con muchos intereses y menos divertido; o la presión familiar es tan grande que pasa a ser un suplicio con la consecuencia de la gran cantidad de abandono en edad infantil, que luego sólo algunos recuperan más tarde ya transcurridos los años y en edad adulta.
Ahora con toda la humildad del mundo lo que me gustaría hacer es un petición a estos mismos padres: cuando apuntáis a vuestros hijos a alguna actividad deportiva, entiendo que una de las causas son inculcar en ellos los grandes valores que el deporte atesora: compañerismo, trabajo en equipo, sacrificio, amistad,etc. Pero he aquí que el valor que no se puede perder desde las gradas, ya porque rompe con todos los demás, es el respeto. Respeto por los jueces, respeto por los entrenadores, respeto por el rival, respeto por el compañero de equipo, respeto por las instalaciones; en una palabra, respeto por el deporte. No os olvidéis que sois el espejo de vuestros hijos sino también de los amigos de vuestros hijos, mi petición es respeto.
Respecto a este asusto una noticia novedosa ha traspasado el papel, una decisión de la Federación Catalana de Fútbol pone en marcha una campaña llamada “Cero Insultos en la grada” permitiendo a los árbitros suspender partidos por insultos, xenofobia o violencia de género; estaremos muy atentos de cómo evoluciona esta decisión, quizás ésta sería una gran forma de dejar en evidencia a los padres que no ayudan a sus hijos a diferencia a los que si lo hacen.
Os dejo unos enlaces muy interesantes sobre este tema, que espero que nos sirvan para un deporte mejor y para que septiembre vuelva a ser un mes ilusionante para todos los niños. Gracias.
Patricia Ramírez: http://elpais.com/elpais/2014/09/19/eps/1411145614_994965.html
Men´s Health: http://blogs.menshealth.es/fitness/consejos-para-padres-de-ninos-deportistas/
(*) José Miguel Martín Criado es concejal de Deportes del Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz
