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Los sindicatos UGT y CC.OO exigen más medidas tras la muerte de un trabajador en Alcalá

Lo hacen tras haberse concentrado este viernes 20 de noviembre frente al Ayuntamiento de Alcalá de Henares, en la Plaza de Cervantes.

Ha sido una concentración de protesta por la muerte de un trabajador en un accidente laboral como consecuencia de las graves lesiones sufridas por el aplastamiento de un montacargas. El martes fallecía este empleado de 41 años en la calle Brasil de Alcalá de Henares. La muerte se produjo en una planta logística cuando el trabajador fue aplastado por un montacargas.

Los sindicatos quisieron así mostrar su dolor por este nuevo accidente laboral que ha costado la vida al trabajador y para solidarizarnos con el dolor de la familia y compañeros. UGT señala que en los 10 primeros meses de 2020 (de enero a octubre) se han registrado un total de 55.715 accidentes de trabajo y 51 trabajadores han perdido la vida por accidentes laborales en la Comunidad  Autónoma de Madrid en este periodo.

DESDE ENERO, 52 TRABAJADORES HAN PERDIDO LA VIDA EN ACCIDENTES DE TRABAJO

cc.oo

Desde La Union Comarcal Este de UGT-MADRID  y CC.OO. del Henares , queremos mostrar nuestra consternación por el trágico suceso ocurrido el 17 de noviembre de 2020 cuando un trabajador de 40 años ha fallecido aplastado por un montacargas, por causas que se están investigando. MANIFESTAMOS TODO NUESTRO APOYO Y SOLIDARIDAD a la familia y a los compañeros de la víctima.

Tenemos constancia de que la autoridad laboral ya está realizando la investigación del accidente, por lo que debemos esperar al resultado de dicha investigación para conocer las causas y determinar las responsabilidades correspondientes.

Es de gran importancia que las empresas cuenten con procedimientos seguros de actuación a la hora de realizar trabajos que conlleven riesgos graves para la salud de los trabajadores como puede ser el manejo aparatos de elevación de cargas.

Desde CC.OO. y UGT Madrid venimos alertando sobre las cifras de la SINIESTRALIDAD en nuestra Región, haciendo hincapié en que hay que tomar medidas para detener esta LACRA que afecta de manera muy grave a salud de los trabajadores. En lo que va de año, HAN PERDIDO LA VIDA 52 TRABAJADORES y hasta el mes de octubre se han producido 47.608 accidentes en el trabajo.

La situación laboral actual refleja el deterioro de las condiciones de trabajo con un aumento de la precariedad, la temporalidad, el trabajo intensivo y la externalización de actividades que se está generalizando en todos los sectores.

Todo ello es a CONSECUENCIA DE LA REFORMA LABORAL, que reivindicamos debe ser derogada.

La debilitación de la Negociación Colectiva deja indefensos a los trabajadores y trabajadoras viéndose obligados a aceptar condiciones de trabajo que ponen en riesgo su salud física y psicológica, generalizándose el miedo a perder el puesto de trabajo si reclaman el cumplimiento de la Legislación.

La pérdida de derechos de los trabajadores y las trabajadoras hace que aumente la siniestralidad y que empeore la seguridad y salud de las trabajadoras y trabajadores de nuestra comunidad autónoma.

Y la pandemia mundial no ayuda. Desde que se ha sucedido esta situación, incluidos los confinamientos, ha habido una disminución de la actividad laboral que no se está viendo reflejada en las cifras.  No hay que dejar de lado que la COVID 19 es preocupante, pero los riesgos en los puestos de trabajo también. En España ya son 568 personas las que han perdido la vida en sus puestos de trabajo.

La sociedad madrileña debe condenar cada uno de estos accidentes laborales y se debe implantar una cultura preventiva en el que se cumpla la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y se mejore las condiciones laborales.

NO VALEN EXCUSAS, es responsabilidad de todas y todos el exigir a los empresarios que la salud y seguridad en el trabajo es lo primero, que todas las muertes son terribles e injustas y que no estamos dispuestos a resignarnos, sino que es momento de actuar para parar esta sangría.

NO ES POSIBLE TENER UNA SOCIEDAD DECENTE SI EL TRABAJO NO ES DIGNO, Y EL TRABAJO NO PUEDE SER DIGNO SI NOS LLEVA A LA MUERTE.

Fotos: CC.OO