La subasta que iba a tener lugar en Londres con una de esas piezas de alabastro del Siglo XV se paralizó tras la intervención de las autoridades policiales. El alcalde anuncia que el Ayuntamiento pagará una parte de la restauración.
Ya están expuestas al público en el Museo de la Catedral de Alcalá de Henares. Nos referimos a una de las joyas del arte gótico tardío vinculadas a Alcalá: un «tesoro» de alabastro del Siglo XV, dos piezas que se encontraban en el sepulcro del Cardenal Carrillo de Acuña y que desaparecieron para siempre tras la Guerra Civil y un posterior incendio que sufrió la Catedral de Alcalá. Su destino, al menos una de ellas, el mercado negro. Ahí es donde hubieran acabado de no ser por las gestiones realizadas por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, y la intervención de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, con la colaboración de la Interpol.
Ahora, ambas piezas lucen ya en el Museo de la Catedral. Las piezas se han recuperado después de que el Obispado, en colaboración con otros miembros de la sociedad civil alcalaína iniciaran hace unas semanas una campaña de micromecenazgo para poder sufragar dichos gastos (el Obispado sufragará la mitad).
Es más, como la cantidad total aportada por el «crowdfounding» no había sido suficiente, el propio alcalde complutense Javier Rodríguez Palacios (foto superior) ha afirmado durante la presentación, que el Ayuntamiento correrá a cargo de esos 3.000 euros que faltaban para poder pagar la restauración de las piezas. Este miércoles, con representantes de dichas instituciones presentes en la Catedral, ha tenido lugar el acto de presentación de dichos relieves tras su correspondiente restauración.
Recuperadas 2 joyas arqueológicas del s.XV gracias a @guardiacivil, instituciones y particulares. Desde hoy en la Catedral de #Alcalá pic.twitter.com/rz5EOYT1FQ
— La Luna de Alcala (@lalunadealcala) 24 de mayo de 2017
LA BÚSQUEDA
Tras muchos años de pérdida, una de esas piezas, el Relieve de la Prudencia, había aparecido en una Galería de Arte de Londres. Es ahí, justo en ese momento, cuando el Obispado tiene conocimiento y avisa a la policía y se interviene rápidamente intercediendo una denuncia y reclamando la pieza que había desaparecido durante años.
De hecho, la otra pieza que se ha conseguido recuperar es el Relieve de la Templanza que se situaba al otro lado del sepulcro. Estaba en el Museo de la Fundación Arresa, en Corella ( Navarra ). Sus responsables, tras conocer la investigación, la han cedido al Obispado de Alcalá a cambio de una réplica (foto inferior Juan Miguel Prim, vicario de Cultura de la Diócesis).
SOBRE EL ARZOBISPO CARILLO
El Arzobispo Alonso Carrillo de Acuña murió en Alcalá de Henares el 1 de junio de 1482, siendo enterrado en la Capilla Mayor del Convento franciscano de Santa María de Jesús –vulgo “de San Diego”–, por él fundado. Su sepulcro lo realizaría el maestro Sebastián de Toledo. Se instala en el centro del presbiterio, aunque años después será trasladado al lado del Evangelio. Allí permanece hasta la desamortización de Mendizábal en el siglo XIX. El sepulcro podría estar fechado alrededor de 1489 y es obra del escultor Sebastián de Toledo, uno de los grandes escultores de la mitad del Siglo XV. La pieza se encontraba en uno de los laterales del sepulcro.
Sus restos son exhumados el 11 de junio de 1856 y trasladados a la Magistral junto con las piezas del sepulcro, que habían permanecido desmontadas y arrinconadas en el antiguo Convento, utilizado en ese momento como Cuartel. El 6 de septiembre de 1857 concluye la restauración del sepulcro del arzobispo Carrillo, que queda instalado a los pies de la nave central de la Magistral.
El sepulcro se conservaba íntegro, pero en su lugar original sólo puede verse una losa en el suelo nada más entrar en la Catedral. Tras los daños sufridos en la Guerra Civil y un incendio desaparecen esas piezas (foto superior facilitada por el Obispado con restos del techo de la Catedral sobre el sepulcro. Actualmente puede verse en el Museo de la Catedral Magistral.
Informa: Raúl Pacheco
