En plenas vacaciones de Navidad en Alcalá hoy recorremos la Calle de los Colegios, con el Convento de Santa Úrsula al fondo.
Toponimia la de esta calle evidente si atendemos al carácter histórico de algunos de sus edificios: los antiguos colegios de Santa Catalina o de Los Físicos y Artistas, el de Teólogos de La Madre de Dios –ambos fundados por Cisneros-, el de San Jerónimo o Trilingüe, entre otros.
Se dice que dos jóvenes estudiantes del Colegio de Teólogos paseando por esta vía comentaron -“Famoso sitio para edificar colegios”, a lo que su compañero replicó –“En este lugar hemos de fundar dos, cada uno el suyo”. Y así fue, eran el arzobispo Loaysa, quien fundó el Colegio Menor de San Clemente Mártir, y el obispo Juan Alonso de Moscoso, fundador del Colegio de San Ciriaco y Santa Paula de Málaga. No solo por eso la historia les dio la razón. Fue tan certera su apreciación que la calle Roma, que así es como se llamaba, acabó denominándose calle de los Colegios.
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