Es evidente que la vida deportiva de los jugadores tiene fecha de caducidad, y aunque parezca mentira también para los porteros. No sabemos si la de Luis Amado será una retirada definitiva para dejar de seguir en activo (Qatar, China, Rusia, EEUU o vaya usted a saber mediante), pero lo que sí tenemos claro es que es una retirada de la élite del fútbol sala español y dejando atrás la friolera de veintiún años de sus cuarenta primaveras y acumulando más de 50 títulos y 179 internacionalidades. Unos números mareantes que hacen de este considerado con criterio como leyenda del deporte español, y que le han convertido en todo un ejemplo a seguir y que será prácticamente imposible que en la historia del deporte español otro deportista pueda igualar.
Todo ello gracias a un currículum, el de Luis, plagado de Ligas, Copas de España, Supercopas, Copas del Rey, Copas de la UEFA, Intercontinentales, Recopas de Europa, Copas Ibéricas, Campeonatos del Mundo y Campeonatos de Europa de selecciones… Lo dicho, algo mareante. Evidentemente estos logros no son méritos individuales, pero mucha culpa tendrá de ello cuando temporada tras temporada siempre ha estado jugando en la élite y junto a los mejores.
Inter ya ha dejado claro que las puertas de su club siempre estarán abiertas para él y es indudable que el mundo del fútbol sala parece evidente que tendrá las puertas abiertas para él. Pero el deporte español no puede permitirse el lujo de no contar en sus organigramas técnicos con enciclopedias deportivas andantes como es el caso de Luis Amado para hacer crecer nuestro deporte a cotas más altas.
Acostumbrado a levantar Copas y Trofeos de todos los colores y tamaños, a Luis Amado sólo le ha faltado levantar algo: la bandera de España en unos Juegos Olímpicos. Hubiera sido el mejor abanderado español con ese currículum. Y no lo ha conseguido porque los que mandan, y ahora que tenemos los juegos olímpicos de Río a la vuelta de la esquina, no se han dado cuenta que el futsal merece ser olímpico bastante más que como por ejemplo lo son o han sido para asombro internacional: la natación sincronizada individual, tirar de la cuerda, escalar la cuerda o la natación con obstáculos…. ¡algo de locos!, o en los juegos olímpicos de invierno ese pedazo de deporte en el que sus participantes se afanan en barrer el hielo por el que va a pasar una piedra….En fin, cuando el Futsal sea Olímpico (que por cordura y cuando la FIFA lo permita lo será), Luis Amado lo estará celebrando como todos y esperemos que impulsándolo desde las instituciones deportivas más importantes. ¡Hasta siempre Crack!
