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Jiménez Piernas: «La crisis es descomunal y dar una respuesta adecuada es muy difícil»

La situación de los refugiados sirios, a debate

¿Qué ha provocado el movimiento migratorio hacia Europa de cientos de miles de refugiados sirios?, ¿Europa ha estado y está a la altura de las circunstancias en esta crisis?, ¿Están los países europeos preparados para asumir el reto que supone la acogida de más de un millón de refugiados? El catedrático de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la Universidad de Alcalá, Carlos Jiménez Piernas, estima que la UE no ha hecho las cosas bien desde el principio: «El  régimen jurídico de la UE establece que el estado fronterizo del espacio Schengen que recibe al demandante de asilo debe registrarle y acogerle hasta que se tramite su expediente. Pero ni Grecia ni Italia, aunque estaban obligados, han hecho este trabajo. Se ha roto la solidaridad establecida formalmente en la UE y han dejado pasar libremente a cientos de miles de personas».

Personas que, hasta el momento, en su mayoría, esperaban en los países fronterizos con Siria -Turquía, Líbano, Jordania y Egipto- una solución al conflicto civil que se está produciendo en su país: «Europa tiene que poner toda su capacidad diplomática y mucho dinero encima de la mesa  para que los refugiados sirios gocen de unas condiciones de vida dignas en los campos de refugiados de los países fronterizos con Siria, donde permanecen porque tienen la esperanza de volver a su tierra, a sus casas, a su vida de siempre».

En su opinión, «estamos ante un problema político de grandes dimensiones y que haya millones de personas esperando en las fronteras de Siria para volver a su patria sería una significativa medida de presión porque se lanzaría al llamado Estado Islámico y a El Asad un mensaje muy claro y alto sobre lo que reclama la inmensa mayoría del pueblo sirio: la paz con un régimen político que les respete como ciudadanos. Pero el conflicto se prolonga, no hay esperanza de regreso y la situación de los refugiados en los países fronterizos es muy mala».

El experto en Derecho Internacional considera «imparable» el movimiento emprendido por los ciudadanos sirios y anuncia que el reto fundamental para Europa es la integración, sin olvidar que «la normativa de la UE respecto al asilo y refugio está diseñada para crisis pequeñas en las que hay que acoger a pequeños grupos; ahora se han roto las costuras y hablamos de integrar a un millón de personas… La crisis es descomunal y dar una respuesta adecuada es muy difícil».